Cefalea tensional

Es la más frecuente, es decir, es el clásico dolor de cabeza que sufre la mayoría de la población con recurrencia. Se trata de un dolor o molestia en la cabeza (como si una banda ajustada la presionase), en el cuero cabelludo o la zona superior del cuello y suele deberse a la tensión o contracción de los músculos de esta zona. Las causas son múltiples, como posturas incorrectas mantenidas de cuello y cabeza, forzar la vista, fatiga, consumo excesivo de tabaco, cafeína y otros excitantes, y fundamentalmente la ansiedad y el estrés.

Migraña

También llamada jaqueca, es el dolor de cabeza más incapacitante. Durante años, se atribuyó a estas cefaleas un origen vascular por constricción y dilatación de los vasos sanguíneos de la cabeza y del cuello.

En la actualidad hay distintas opiniones y se cree que el ataque realmente comienza en el cerebro mismo e implica varias vías nerviosas y químicos en este órgano. Son estos “desarreglos” neurológicos y bioquímicos los que afectarían al sistema vascular del cerebro.

Actualmente, las crisis se atribuyen a un defecto en los canales de calcio de las neuronas, los “poros” que permiten el paso de diferentes sustancias a través de la membrana celular. A su vez, esto produce una liberación defectuosa de neurotransmisores (los mensajeros de los impulsos nerviosos entre las neuronas) y, como consecuencia, una excesiva excitación neuronal.

Esto produce que haya un exceso de actividad y, en consecuencia, un aumento de rigidez tisular. Estos desarreglos son los que ocasionan un ataque de migraña, un dolor de cabeza pulsátil recurrente e intenso. El dolor puede darse en un solo lado de la cabeza o estar acompañado, además, de otros síntomas como molestias estomacales o síntomas visuales (las denominadas migrañas con aura).

Tratamiento

Es habitual que las personas que padecen tanto migrañas como cefaleas tensionales tengan que tomar con frecuencia fármacos varios días consecutivos para sobrellevar las actividades de la vida diaria, como triptanes, antiinflamatorios, antieméticos, sedantes, etc.

En nuestra clínica el tratamiento de esta dolencia es de un 80 – 90% de éxito en la recuperación de nuestros pacientes.

Un tratamiento completo con técnicas de osteopatía craneo-sacral, miofascial, masaje cervical, etc. (en función del estado y las necesidades de cada paciente) junto con pautas y cambios de hábitos en la vida diaria actuarán sobre la causa que activa el dolor de cabeza.

Durante la sesión se realiza una evaluación y un trabajo de estimulación sobre el cráneo y las meninges. Esto influye sobre la circulación del liquido cefalorraquídeo, disminuyendo su presión, reequilibrando el sistema cráneo-sacral y la movilidad de las meninges (así como del resto del sistema fascial) y mejorando la regulación y el funcionamiento del sistema nervioso, creando así una profunda relajación.

Cada día son más los pacientes que son tratados con esta técnica y que pueden decir ¡ADIÓS a la MIGRAÑA!

Plácido García

Fisioterapeuta y Terapeuta Transpersonal

Adrián Morón

Fisioterapeuta